vendredi, décembre 25

Cerrado por navidad

ah! feliz Navidad :)

mardi, décembre 22

Gini Mei

Gini Mei nació hace 25 años muy lejos de aquí. Conoció a Rai hace 4 años. En este instante están sentados el uno frente al otro; puedo verlos. Gini hace muecas y Rai mantiene la mirada fija en un punto lejano.
El gorro de cazador de Rai lo distrae al caer y Gini Mei alarga sus ágiles brazos para alcanzarlo. El viento empieza a soplar fuerte, y el sombrero se le escapa de las manos. Gini Mei se levanta y corre detrás de él . Rai ve como Gini Mei desaparece entre los árboles; mira al cielo.
Gini Mei sigue el rastro del sombrero. Hay un pequeño sendero, por el cuál sigue corriendo. Los árboles mecen sus ramas y las ramas mecen las ojas…y el viento hace vibrar las células vegetales. El sombrero de cazador sigue bailando al son del viento, las vibraciones del cual cada vez son mas fuertes.
Gini Mei acelera sus pasos aún un poco más para intentar alcanzar el sombrero de caza que cada vez se desliza mas deprisa.
Rai sigue mirando hacia el cielo, que se ha vuelto medio gris. Rai concentra su mirada en esas nubes espesas que le gobiernan. Su cara relajada empieza a adquirir unos duros y rígidos rasgos. Algo está sucediendo, él lo presiente. Yo lo presiento.
Gini Mei sigue su carrera. ¿Persiguiendo qué? –se pregunta- ¿y por qué?
El sombrero de caza sigue veloz, sin caer. ¡Cómo es posible!
Gini Mei pierde el aliento. Las gotas de sudor recorren sus brazos hasta rozar las yemas de sus dedos.
El sendero desparece y Gini Mei llega a un gran círculo blanco cerrado. Un círculo sin salida.
El sombrero de caza empieza a dar vueltas sobre si mismo en el medio del círculo. Gini Mei se tumba en el suelo, exhausta, y observa.
¿Qué estará haciendo? – Piensa Gini Mei -, pues no entiende.
Rai se ha puesto en pie. Da vueltas sobre si mismo. Algo le sucede. Parece que ha perdido el control sobre sus extremidades. Intenta chillar, pero no puede. Mueve los brazos de forma desesperada, pero no puede parar de girar. Sigue girando, y gira, y gira, y gira…cada vez la inércia le hace girar de forma mas veloz. Vomita. El vómito sale disparado y salpica la hierba.
Gini Mei sigue observando el baile del sombrero de caza sin entender que sucede. Ya descansada se pone en pié e intenta alcanzarlo, pero por mas saltos que da no lo consigue. El tiempo pasa y Gini Mei vuelve a cansarse de perseguir algo que no puede alcanzar. Cuando se rinde, parece que el sombrero también lo hace.
Orgullosa, al fin, coge el sombrero. Se lo coloca en la cabeza y corre deshaciendo el camino. Cuando llega delante de la casa ve el porche vacío.
- Raaaaaai! –grita-
- He atrapado a tu maldito sombrero!!!
Gini Mei no obtiene respuesta. Qué extraño –piensa-, ¿dónde se ha metido?.
Entra a la casa y coloca el sombrero en el perchero.
- Raaaaaaai?
Vuelve a responderle el silencio.
Asustada revisa todas las habitaciones de la casa, pero Rai no está en ningun lado.
Vuelve a salir al porche y queda estupefacta.
Paralizada. La sangre le sube a la cabeza. Siente un mareo enorme. Un vacío sin fin. Intenta llamarlo pero no es capaz. Intenta caminar hacia él pero no puede y cae al suelo de rodillas.

El cuerpo de Rai yace sobre la hierba. La sangre cae por sus ombros.
Y…el sombrero, el sombrero de caza está sobre su cabeza…situada en medio de un gran círculo blanco cerrado que se ha creado en medio de los hierbajos.

Parece una cabeza de caballo, Gini Mei se desvanece.


Lou

vendredi, décembre 18

Si furioso me hubiese levantado aquella mañana nada, y digo absolutamente nada de lo que ocurrió hubiese ocurrido.
Debían de ser aproximadamente las cinco de la madrugada y soñaba con un paraguas. Un gran paraguas que me protegía de grandes granos de café tostado que caían del cielo. Me parecia estar en un lugar utópico, de ambiente cálido, cielo azul turquesa y nubes blancas y espesas. Extendía los brazos dejando caer el paraguas para coger todos los granos de maíz que pudiera! Pero cuando caía al suelo estos me golpeaban tan fuerte que se me hundían en las mejillas, los brazos, las piernas… ¿De donde debían proceder? Tenían tanta fuerza que parecían llevar siglos cogiendo velocidad!
Volví a coger el paraguas y me resguardé. De pronto empezó a llover algo que al principio no supe reconocer. Eran unas gotas transparentes, pero de una espesor extraña. Saqué la mano fuera para comprobar que caía y un impulso nervioso me hizo retirarla en el acto: ¡aceite hirviendo! El pánico se apoderó de mi. Corría y corría y corría pero a ningún lugar llegaba. El paraguas empezaba a pesar tanto que casi me era imposible sostenerlo derecho. Seguí corriendo indefinidamente hasta llegar a un sin lugar sin fin. Un gran barranco, que daba a un vacío oscuro que no alcanzaba a ver. Lo bueno, en estos momentos, sería saber que estas soñando y lanzarte al vacío para saber que es lo que se experimenta, pensé, cuando…caí en la cuenta de que estaba soñando. Así que…me animé a saltar al vacío. Y, decidido, salté.

Ahora estoy aquí, escribiendo desde la cama. Estoy, digamos…un tanto indispuesto y avergonzado. Un poco de ambas cosas. Concretamente sufrieron mis neuronas y mis costillas, y también un poco mis piernas.
Si, eso es. Resulta que mientras yo corría protegiéndome de gotas de aceite que intentaban asesinarme…en realidad lo que hacía era correr por mi habitación…Y la ventana fue lo que se presento como un gran, oscuro y apetitoso vacío. Así que doy gracias a mamá que decidió habitar en un primer piso.
Esta mañana ha venido a visitarme Cat al hospital, donde llevo unas dieciocho horas duermiendo. Me ha traído un bocadillo de brie con jamón y un libro para que me entretenga. Mamá dice que me recuperaré pronto, pero que aún me tienen que hacer algunas pruebas médicas antes de poder volver a casa.
Me he estado preguntando, a raíz de lo ocurrido, algunas cosas sobre los sucesos cotidianos que nos abordan de tanto en tanto en esta vida, como por ejemplo, mi salud mental.
¡¿Qué debería estar pensando en ese momento?!
En fin, hay que joderse. Espero no tener muchas neuronas lesionadas, por lo menos sé que aún tengo la capacidad de pensar, y eso me alivia.
¿Imaginas levantarte y no saber nada, de nada, de nada?
Entonces si que correría hasta algún abismo y saltaría de lleno al fondo.


Lou.

mercredi, décembre 16

Había seguido todos y cada uno de los pasos escrupulosamente.
Se había lavado las manos, pintado las uñas de color azul oscuro, y colocado los guantes de piel de vaca; había cogido el detergente azul del armario y había lavado cuidadosamente la bañera. Todas las juntas del suelo ahora estaban intactas. Después había ido al dormitorio y había cambiado las sábanas, donde dos horas mas tarde yacerían su marido y Dionis, abrazándose y restregándose cuerpo a cuerpo para coger el calor que en el exterior faltaba.
Desde el comedor, dentro del armario de la limpieza, los oía.
Primero escuchó pasos, luego risas y finalmente vio la puerta entreabierta. Los cuerpos aún seguían vestidos. Su marido había dicho algo de una taza de café, pero no abandonaron la habitación, lo que significa que el deseo pudo al frío -una vez más, pensó ella.- Sin darse apenas cuenta empezaron los aullidos. La ropa empezó a volar y a caer al suelo con ruidos sigilosos; la cama que ella antes había hecho tan cuidadosamente se deshizo de una forma desgarradora. Los gemidos rompieron el silencio. Los muelles de la cama empezaban a tiritar. A través de rendija podía ver dos largas piernas que cobijaban la cara de su marido, que sumido en el placer, saboreaba el fluido del fruto maduro de su querida Dionis, que se retorcía y se hundía en su cabeza.
Ahora, estando segura de que los animales no escucharían nada ajeno a ese placer en el que estaban sumidos, salió del armario sin ninguna precaución. Se dirigió, tarareando una canción, al vestíbulo y cerró la puerta con pestillo. Luego fué a la cocina y encendió el hornillo. Puso la mesa: un mantel pequeño, un plato, un tenedor, un cuchillo y una única servilleta.
Entraba el sol, por la ventana. En cuanto se dió cuenta cerró las cortinas. El hornillo empezaba a calentarse.Volvió a su posición y comprobó como los amantes seguían sin saber lo que estaba sucediendo. Por parte suya nada podría estar yendo mejor.Los muelles ahora danzaban al son de los cuerpos emitiendo un agudo ñic, ñic, ñic, ñic,... Los gemidos eran cada vez mas intermitentes. Aquella zorra estaba cada vez mas exhausta. Ante esto no pudo más y comprobó que el reloj marcaba la hora prevista. Se dirigió al cuarto de baño, cogió de detrás de la puerta el bidón de gasolina que había comprado y llenó la bañera con el líquido. Volvió al cuarto de la limpieza y cogió el revólver. Decidida a acabar con todo abrió la puerta de la habitación emitiendo un sordo BASTA CERDOS!, que le salió de lo mas hondo de su garganta.
Los cuerpos pasaron de experimentar el máximo placer a estar sumidos en un horrible miedo.Su marido tenía el pene erecto y le costaba subirse los pantalones. Ante esta repugnante escena decidió proceder y el cuerpo cayó al suelo cuando le llegó su correspondiente tiro en la cabeza.
Dionis no chillaba, aullaba de desesperación como una loba hambrienta. Alguien que ni siquiera sabía que existía la conducía a su cuarto de baño apuntándole con una pistola en la sien.Un hedor putrefacto salía de su cuarto de baño. Al entrar se dió cuenta de que su bañera estaba llena de gasolina y el terror invadió su cerebro, su mente, sus entrañas. Empezó a berrear y suplicar hasta que los labios no le respondieron. Se vió hundida en la bañera y vio como aquella mujer feliz le tiraba una cerilla a los ojos. Luego solo vio fuego.

La felicidad y la satisfación que sentía la impulsó a la cocina, donde su pastel de manzana estaba casi cocido. Se quitó los guantes y abrió la ventana. Retiró el pastel, colocó su trocito correspondiente en el plato y lo comió lentamente.
Luego metió el plato y el tenedor en su bolsa, corrió el cerrojo de la puerta y salió.

mardi, décembre 15

I was born under a wandering star...
I was born under a wandering star...

...................................i que verdad tan absoluta la suya!
(http://www.youtube.com/watch?v=xnbiRDNaDeo)


dimanche, décembre 6

L o n d o n.

mercredi, décembre 2

Estoy cansado de dejar pasar el tiempo inconscientemente, de verme rodeado de gente, de pensar ¿¡qué coño hacemos aquí!?

El mundo esta repleto de chillidos, palabras, gestos, miradas, insultos, patadas, aviones, barcos, trenes, coches, motocicletas, bicicletas, carreteras, gasolineras, puertas, ventanas, paredes, casas, mares, desiertos, ciudades, pueblos, montañas, lagartos, bueyes, camaleones, papayas, plátanos, sandías, naranjas, peras, guisantes, calabacines, escarolas, berenjenas, ojos ansiosos, ojos pasivos, ojos que no ven, orejas sordas, que escuchan, que escuchan lo que quieren, brazos largos, cortos, uñas largas, cortas, pechos grandes, pequeños, labios gruesos, finos, alientos, ansiedad, depresión, enfermedad, mentes perversas...imposible más, imposible.

Todo es tan grande, y yo tan pequeño! Me suicidaría si me volviera un obseso. No soporto cuando pienso esas cosas, me vuelvo un ser deprimente. Lo que suelo hacer entonces es ir al aeropuerto. Allí todos están de paso.Estan los que lloran porque llegan, o porque se van. Cuando miro la escena muda, sin prestar atención a los vuelos que salen y llegan anunciados por el altavoz, pienso que un aeropuerto simula la muerte. Porque la misma escena, en otro contexto, así me lo parecería. Imagino el día de mi muerte.Llevaré en mi única maleta todo el equipaje que he podido recojer en esta vida, lo que me puedo llevar conmigo a donde quiera que vaya.Tendré el mismo miedo que tengo ahora cada vez que cojo un avión, temblarán mis dedos y el sudor caerá de las palmas de mis manos hacia el suelo.Pensaré en todo lo que perderé, en todo lo que dejo atrás.

¿Dónde está el que un día fue mi padre, y mi madre, y mis hermanos?¿y mi abuela, que tan fina y pequeña se volvió antes de desaparecer...?¿y mi mujer...la única a la que amé en toda mi vida, de la que juré no separarme jamás...?¿y mis fotografías, y mis libros, y mis escritos?¿Desaparecerán con mi muerte?¿Y mi casa....mi habitación...?Basta.

Me pegaría un tiro en la sien. La luna me afecta al cerebro...Por cierto, ¿dónde iría la luna esta tarde que ha desaparecido?



lou

mardi, décembre 1

Quiero fotografiar las avionetas que pasan por encima de la c-58...

vendredi, novembre 27

Carrol sabía que cualquier día las cosas iban a cambiar para él. Lo presentía porque nunca hasta el momento le había sucedido nada que el quisiera. Nunca se había sentido abatido por nada ni por nadie, y eso estaba por desvanecerse. De ello estaba seguro.

Carrol vivía en una fábrica. Por las noches atravesaba la puerta. Subía por el gran ascensor de mercancías hasta el primer piso. Atravesaba un taller repleto de cuadros a medio pintar y se hacía paso entre botes de pintura y restos de cartón hacia su hogar. Entraba sin tener que abrir cerradura alguna.
Encendía las luces. Ante el sus queridas pertenencias. Su sofá, su mesa, su cocina y la gran vidriera que le recordaba que existía un mundo exterior.
Solía coger su saxofón nada mas llegar. Limpiaba cada una de sus piezas y lo montaba. Hecha la faena lo dejaba sobre el sofá y se quitaba los zapatos y los pantalones y quedaba con una camiseta interior. No solía tener frío en las noches de otoño.
Cuando se colgaba el saxo al cuello empezaba a tocar. Lo tocaba con los ojos cerrados, concentrado a todos y cada uno de los sonidos que emitía. Tocaba dirigiendo la melodía hacia el sofá vacío, como si tocara para alguien. Emitía un sonido extremadamente dulce y estremecedor. Como si lo hiciera todo para la mujer que, estirada en el sofá, desnuda, lo escuchaba absorta en todas y cada una de las notas que desde su mas profundo aliento emitía.
Pero al terminar la melodía un silencio ensordecedor inundaba el apartamento. El sonido había viajado hacia otro lugar. Y cuando Carrol abría los ojos se sentía eternamente triste y solitario.
Dejaba caer el saxo en la moqueta y se estiraba en el suelo, donde por unos instantes dejaba que su mente pensara en lo que se le antojara.
Y se daba cuenta, de que, incosncientemente, en cada uno de esos instantes que le regalaba a su mente, esta se dedicaba a pensar en Nora. Y Nora, por desgracia, ya no estaba allí.
Y aunque no estuviera allí en realidad si lo estaba. Estaba en su vida, en sus recuerdos. Nora lo fue todo para él. Y Nora desapareció dejando todo el apartamento lleno de recuerdos, del que Carrol ahora tenía que hacerse cargo.
Y a cada paso que daba encontraba su rastro. Y deseaba decirle que se lo llevara todo de allí, que desapareciera de verdad.
Pero por mucho que chillara nadie le escuchaba, porque la muerte no da ojos ni oídos, no da vida ni dolor.
La muerte deja el rastro de todo lo que se lleva. Cosas que nunca desaparecerán de la faz de la tierra y de las que no podemos desprendernos, porque son lo único que nos queda.
Y Carrol no sabía que hacer con todo aquello. Pues el dolor que sentía estaba acabando con él.
La soledad mas sola, reflejada en el cuerpo desnudo tumbado en el sofá, que hace que escucha pero en realidad no existe.

LOU

dimanche, novembre 22

Escucho en silencio el grito de los grillos en la noche, el del viento que se refugia entre las ramas de los árboles, el temblor de la niebla que se amontona en los bordes del camino.
Camino lentamente por el sendero que me lleva hasta el faro. Mi mente: en blanco. Pienso en los sonidos que me rodean y siento el viento que me roza la piel, mis pies que dañan el suelo. No quiero sentir lo que dejo atrás, sino lo que más adelante me espera. A lo lejos se oye el mar. Las olas deben estar chocando contra el acantilado, lo hacen sin cesar, segundo a segundo. La naturaleza no descansa.
No tengo frío, me siento bien. Tengo miedo de encontrar algo que no sea capaz de ver.
Sigo caminando, acelerando el paso a medida que me adentro en el bosque. Estar lejos de la civilización me hace sentirme inmensamente pequeño y frágil.
Necesito llegar al acantilado y ver que hay un final. Siento angustia de no poder encontrar el camino, de perderme y no poder volver atrás. No puedo dejarme llevar,a medida que avanzo me invade el miedo.
Las manos se me inundan de sudor. Tengo frío. Tengo miedo....
pero,
¿de qué?


Lou

mercredi, novembre 18

Dan, me estoy muriendo de frío.
Igor tiene la estufa en su habitación y me ha dejado aquí solo, en el salón, helado. Mis dedos parece que se van a romper de un momento a otro.
Estos días no hago mas que comer, dormir, ir al baño y escribir. Apenas salgo de casa. El frío me prohíbe cualquier actividad que implique desplazarme por el polo norte -algo así siento cuando salgo a la calle-.

Igor se pasa el día encerrado en su habitación, vete a saber que es lo que hace allí todo el tiempo, no da explicaciones a nadie. De vez en cuando pongo la oreja en la puerta para comprobar que sigue vivo. Antes de ayer mismo, le escuché cantar una canción de Bob Dylan. Hace tres o cuatro días me pareció oír gemidos, lo que significa que se la estaría pelando, porque Igor no tiene visitas. Curioso. Aún así no intercambiamos más palabras que: has hecho algo para comer? Buenos días. Buenas noches.
Me gusta Igor, y creo que lo soporto.
Me gustaría más que estuvieras tu aquí, a mi lado...pero dentro de lo que cabe estoy contento.
Compré un pez hace un par de semanas. Es muy duro estar solo. Creía que me haría compañía. Lo coloqué en mi escritorio, al lado de las hojas de papel y la tortuga verde de madera. Creo que ni me ve. Me siento solo y al mirarlo me deprimo aún más. Aún así creo que me lo quedaré por algún tiempo, hasta que se muera, quizás. Debe ser duro pasarse la vida en un cuenco de agua helada. No tiene espacio para nadar. Puede que mas adelante, cuando consiga traducir el libro y me haga rico, le compre una piscina. Sería el pez doméstico más feliz del mundo, pues dudo que algún otro pez tenga tanta agua para el solito. Los peces de mar y río tienen mas suerte. No querría reencarnarme en un pez de pecera.
En fin, creo que me está empezando a mirar mal, es como si supiera que estoy hablando de él. Qué asombrosa criatura.
Te dejo porque se me está empezando a congelar la nariz.

Saludos de Anu y míos.

Toulouse, a fecha de 18 de Noviembre del 9

PD: ¿tu también tienes frío? Espero que sí.
Desconcertada por la noche era incapaz de volver a casa. La oscuridad le había hecho perder el sentido de la orientación. No sabía dónde se encontraba ni porqué estaba allí. Montones de calles y edificios desconocido la rodeaban, proyectando sus sombras en el suelo. Se desplazaba ágilmente sin saber a dónde ir. ‘Debemos estar en invierno, pensó, hace mucho frío. El vestido negro corto la guiaba por la ciudad. Sus pies se movían sin un rumbo fijo. Se puso a pensar lugares en los que podía encontrarse. Una ciudad. Londres, Paris, Milano, Barcelona, Madrid… imposible, no hay nadie por las calles. ‘Una farola antigua ilumina mi paso, ¿dónde estoy?’.
Intentaba recordar de dónde venía. No recordaba nada, ni siquiera un nombre. Avanzaba y seguía encontrando lo mismo, calles desiertas. En el cielo la luna temblaba blanca y fría. Las estrellas sollozaban. Ella seguí ágil, deslizándose por aquel laberinto sin fin. Ninguna pista. Ningun sonido. Nada que la hiciera recordar

lundi, novembre 16

Subía unas escaleras.
Subía por las escaleras que me llevan a mi ático, en el séptimo piso de un edificio de la calle Burgon.
Andaba por el vigésimo tercer escalón, mas o menos, no lo recuerdo con total exactitud. Mi cabeza empezaba a perder el sentido. Los músculos y huesos de las piernas dejaron de responderme y caí al suelo. Caí tres escaleras y quedé inmóvil en el rellano. Sentía un dolor punzante en la cabeza y ardor en la boca del estómago. Tenía los ojos cerrados y no fui capaz de abrirlos, por más que lo intenté. Quise chillar pero tampoco pude. No se cuanto tiempo permanecí así, pero a mi me pareció infinito. Mis esfuerzos por respirar normalmente me hacían latir el corazón de forma entrecortada.De repente vi unos ojos. Unos ojos grandes, redondos y bien abiertos. La luz del rellano empezó a parpadear rápidamente. Esos ojos se me acercaban, y no podía verlos. Era consciente de que mis párpados estaban cerrados. Chillaba de temor, de horror, pero no emitía sonido alguno. Intentaba retorcerme y no podía mover una sola parte de mi cuerpo. Algo me agarró el pié. Empezó a retorcerme los dedos, uno a uno. Seguía sin poder emitir un sonido. El dolor se hacía insoportable. Sentí como me caía alguna substancia hirviendo sobre la piel. Y como los ojos se me hundían hacia adentro, como si fueran a parar justo en medio de los sesos. Las orejas me pitaban fuerte. Empezaba a no sentir dolor. Algo me llevo hacia un lugar frío. La piel me ardía por el frío, que se contrastaba con la calor. Escozor y punzadas por todo el cuerpo. Sentí líquido frío. Intenté respirar y el agua me bajaba por la laringe, hasta el estómago. Se me inundan los pulmones, los intestinos, el ano. Y dejé de respirar.

Y toqué fondo.
Y me quedé en el fondo.

Lou

dimanche, novembre 15

Que alguien pare el tiempo,
por favor.

jeudi, novembre 12

lundi, novembre 9

Al verte crecer día tras día, año tras año, soy consciente de lo fugaz que es el tiempo. Parece que fue ayer cuando nos besabamos por primera vez. Parece que fué ayer cuando empezamos juntos nuestras vidas. No me imagino mi vida sin ti. Eres yo. Soy tu. Parece mentira que en los momentos en que deberían salir las palabras éstas no salen, se quedan quietas, inmóviles, perdidas en algún lugar. Prefiero pensarte. mirarte, tocarte... Esperando a que llegue tu hora, la hora en la que apareciste, en algún lugar, pocos días después de la caída del muro de Berlín. Y ya cuando respiraste por primera vez te sentí mío.
Me arañaría todo el cuerpo de la pasión que siento. Me estremezco. Es algo inexpresable.
Te pido mil disculpas, mi amor.

Te deseo.

dimanche, novembre 8

MIRABA HACIA ADELANTE PENSANDO QUE ATRÁS HABÍA ALGUIEN QUE QUERÍA HACERME DAÑO. MIS OJOS SE VUELVEN ROJOS, EMPIEZO A ESTREMECERME, TIEMBLO, SUDO. MÍRAME, TE MIRO PERPLEJA. ESE HALO ROJO QUE ENTRA POR LA VENTANA ME ASUSTA.
¿QUIÉN HAY DETRÁS? DÍME! DIME QUIEN HAY DETRÁS!!
RESPIRA. NO PUEDO RESPIRAR. SE AGACHA AL SUELO. ME ROZA EL TOBILLO. ME APRIETA LAS PIERNAS.
TIEMBLO. TIEMBLO. PERPLEJA.
SE LEVANTA. ME PEGA. ME AZOTA. ME DICE QUE NO MEREZCO NADA DE LO QUE TENGO. ME PEGA AÚN MÁS. CON UNA TOALLA FRÍA. UN MARTILLO. UNA AGUJA EN EL HOMBRO. ME MUERO.
VUELVO A VER EL HALO ROJO QUE ENTRA POR LA VENTANA. PIDO AYUDA.
SOCORRO. SOCORRO. SOCORRO.....!
CASI A DEJADO DE LATIR EL CORAZÓN. ME MANTENGO INMÓVIL. LA MIRADA VACÍA
.


lou

samedi, novembre 7

'Hoy he estado pensando. He llegado a la conclusión de que hay gente bella en el mundo, gente especial. En la butaca de al lado del cine Odeón, Milano, había un hombre. Un hombre que debería estar entre la cuarentena y la cincuentena. Estaba sentado junto a otro hombre. Eran elegantes. Él inquieto. Cuando la sala se ha iluminado en el intermedio le he mirado a la cara. Enseguida he pensado que eran homosexuales. Justo en el fundido a negro de intermedio y al tiempo que se encendían las luces nos hemos quitado las gafas, los dos a la vez. Al rato ambos han entablado una conversa que me ha hecho entender que mi idea, mi prejuicio, era equívoco. Él hablaba de una Nikon, una cámara fotográfica. La primera que tuvo, 35 años atrás. Eso me ha dado a entender que no se conocían, porque una pareja conoce esos detalles. Es muy importante saber la cámara que te pasó primero por las manos? Sí; No. La respuesta es subjetiva. Ninguna respuesta es amoral. Todo está bien desde el punto de vista en que lo mires. (N ríe a mi lado). ¿por qué, si vivimos solamente el presente, debemos preocuparnos por cosas que no son triviales? ¿por qué? Si tuviera la respuesta a esa pregunta sería un ser libre. No importa eso que pase. El pasado no tiene sentido. Porqué, de que sirve un pasado si luego el presente te lo puede arrebatar todo? Si tuviéramos alguna seguridad, alguna certeza, tendría sentido todo lo que hacemos, las preocupaciones. Pero como no hay ninguna certeza no tiene sentido. Pero ahora lo debemos mirar desde el punto de vista contrario. Si existiera alguna certeza del final, ¿como se regiría el mundo? Tendríamos mas claro aquello que queremos en función del tiempo que tuviéramos. Tendríamos miedo a medida que se acercara el momento. Nos arriesgaríamos ha hacer cualquier cosa, porque sabríamos que no es el final. Sabríamos todo y cada uno de los hechos con la absoluta certeza.

lou

mercredi, novembre 4

¿y qué eras en la otra vida?

No lo recuerdo

¿de veras no te acuerdas!? ¿No recuerdas si saltabas, cantabas, llorabas o quizá permanecías inmovil en una gran montaña?

No, señor.

¡Piensa! No te rindas! En mi opinión eras un erizo de mar.

¿Y por qué piensa usted eso? ¿Acaso tengo pinta de erizo?

No, no tienes pinta de erizo, per tuve esa impresión.

¿Y qué es una impresión?

Una impresion es algo que te pasa la cabeza, así, sin mas, y tomas como algo cierto y que puede tener un misterioso valor.

Entiendo. Y usted a tenido la impresión de que yo era...

Sí, efectivamente, que en tu otra vida eras un erizo de mar

Suena bien, y me hubiera gustado, pero yo no era un erizo.

¿ A no?

No.

¿Y qué eras?

Pues era un astronauta marino

Querrás decir un astronauta espacial... o un marinero, quizás.

No, señor, un astronauta marino.

Eso es imposible, no existe tal cosa.

Se equivoca. Tal vez aquí no existá pero allí existía. Allí lo que aquí llamamos aire era el agua, y lo que aquí llamamos agua era el fuego.

Entiendo...pero... mira, es tarde y debo irme.

Adiós.

Adiós, señor.


El viejo Jack volvió a casa, abrió la puerta, cogió su pipa y se sentó en su gran sillon. Sumido en el silencio que reinaba su salón se puso a pensar que su tiempo se acababa y que su vida carcía de sentido. Recordó su infancia y su adolescencia. Y deseó ser capaz de atrasar el tiempo.
Pero, señores, el tiempo no tiene retrasos ni treguas.


Lou

mardi, novembre 3

No me dijo nada. Me hizo pasar a una sala y sentarme en un enorme sillón. Luego se puso detrás. Me tapó los ojos con un pañuelo. Olía a él...
Tardó mucho rato hasta llegar a mis sandalias. Me acarició los dedos de los pies, uno a uno. Luego me quitó la sandália y me chupó los dedos del pie derecho. No pude evitar gemir. Gemí muy fuerte. ¡Qué maravilla!

jeudi, octobre 29

Todos los presos en sus celdas duermen, excepto yo. Esta, como una de otras tantas noches, siento ansiedad y no puedo dormir. La angústia me oprime el
corazón, y me estremezco. Aprieto fuerte los dientes y me duelen las encías. Cuando parece que caigo en el sueño siempre hay algo que me asusta y me devuelve
a la realidad. No puedo refugiarme ni en la inconsciencia. Pierdo el sentido del tiempo. Pero esta noche es diversa. La he estado esperando desde hace más de
un año. Esta noche finalmente podré sonreir y respirar aliviado. Oigo los primeros ronquidos. Son las 3:00PM de la madrugada. Respiro contando hasta diez, inspiro, expiro, inspiro, expiro...La ansiedad se aleja de mis uñas, dedos, manos,brazos, hombros, pecho, muslos, nalgas, piernas, pies, uñas...y sube a los labios, dientes, nariz, ojo, ojo,
oreja,oreja, ceja, ceja...hasta la punta de los pocos cabellos que me quedan.Todo va como lo había planeado. Me incorporo poco a poco. En el suelo, rozando mi pie derecho, está el jarro con el agua. Rozando mi pie izquierdo está el
tornavis. Delante de mis dos pies mi redacción. Empiezo a sudar. Con las manos cojo el jarro con lleno de agua y me lo tiro por encima. Empiezo a tiritar. Me quito el uniforme, mojado, y lo extiendo en el suelo
imitando mi figura. Le coloco el sombrero, que es lo único que me traje conmigo a este antro.Cojo el tornavis con la mano izquierda y me levanto. Siento como tiembla cada parte de mi cuerpo. Coloco los pies encima de mi redacción y pronuncio el
juramento. 'Estoy acabado, estoy acabado, estoy...'Estoy preparado. Me tumbo justo encima de mi uniforme, mirando al techo. Me pregunto si tendré valor, me pregunto si tendré valor, me pregunto si..., pienso.Levanto lentamente mi mano izquierda y observo el tornavís.'Parece que ahora tienes una utilidad que nunca antes habría descubierto. Pareces tan extrañamente letal que me asustas...' le susurro mientras lo observo'Me tiemblan los dedos al sugertarte...vas a ser tu quien me saque de aquí...si, tu me sacarás de aquí...'
Siento como experiemento el traslado hacia un estado desconocido, irracional. El tornavís se ha vuelto benévolo y mis ojos aguantan lágrimas al mirarlo.No puedo soportarlo más. Inesperádamente chillo, me retuerzo del dolor, de la impotencia. Chillo. Berreo. Me retuerzo. Las luces. Se han encendido las luces.
Duda. Desesperación. Fracaso. Éxito. Fracaso. Éxito. Pasos. Los guardias se acercan. Los presos se levantan. Barrotes. Preguntas. Ausencia de respuestas. Todos los sonidos se alejan excepto los pasos. Esos pasos se acercan y me retumban las sienes. Ahora o nunca. Ahora o nunca. Ahora o....El tornavías atraviesa mi cuello.Me falta el aire. Me falta el air...me falta el ai.... me falta el.... me falta...me.......... ________________________.



El jefe de prisión se acerca a la celda 345 de la Modelo.

¿Qué coño ha pasado?, pregunta al oficial
Este le entrega una nota.

'vivir es mas difícil que morir'


Lou

mardi, octobre 27

oggi il sogno non mi lascia aprire gli occhi. Ho chiuso la porta della mia camera e faccio un bagno. Nudo. E il letto mi aspetta per sognare qualcosa di strano stanotte...vediamo. Ho questa impressione...

Lou

lundi, octobre 26

La ausencia de sonido me sugiere un retrete cerrado, pero no puedo pensar en ello. La ausencia de sonido viene acompañada por el fuerte sonido de una tubería -clonggg...-. Después viene el estallido de los retretes. Primero se escuchan gotas, gotas que caen lenta e intermitentemente. De repente miles de gotas rugen y vuelve a llenarse la cisterna de agua.Estoy sentado en el suelo. He traído conmigo la grabadora y llevo un rato intentando captar algún sonido extraño, anormal en el contexto, pero -como es normal- no pasa nada anormal. Esto me relaja. Sentado en un baño: ¿qué puedo esperar? Puedo esperar que entre alguien, así que el sonido de la puerta no me asustará; puedo esperar que resuenen las tuberías; que caigan gotas de agua; que se rompa un espejo; que el viento rompa la ventana.Todo eso entra dentro de lo normal. Algo que puedo esperar. Aun así no sucede nada de eso. Antes escuché unas gotas caer, pero pronto cesaron. Me abrazo las piernas. Enciendo un pitillo. Empiezo a fumarlo.

- Está prohibido
- ¿cómo?
- digo que está prohibido
- ¿quién habla?
- está prohibido

Algo me abrasa la piel, el sudor empapa mi frente, el corazón palpita a un ritmo anormal, los labios no responden. El cigarro cae al suelo. Cae al suelo y empieza a temblar. Tiemblan las paredes, el techo, todo empieza a derrumbarse. Me siento perdido, pierdo el control. El conocimiento de lo que podría pasar o no ha fallado. Por primera vez hay algo que no comprendo, algo que me provoca pánico. El cigarro se retuerce aún en el suelo, hasta apagarse. Está prohibido.Prohibido.prohibido.Resuena por las paredes.

- Quiere decir que no puedes hacerlo. Cuando algo está prohibido quiere decir que no puedes hacerlo. Y quiere decir también que si lo haces algo saldrá mal, muy mal.

Cesa el movimiento. Estoy paralizado. Algo inesperado acaba de suceder. Escucho voces? Me estoy volviendo loco?

Todo es previsible. La percepción de lo imprevisible es lo que provoca la locura.Imagina que estás tumbado en la cama, duermes profundamente, y alguien se tumba debajo de tu cama y empieza a chillar en medio de la oscuridad
loco, te vuelves loco.

Lou

jeudi, octobre 22

Dan, voy a desaparecer. Me he tomado el fin de semana libre y me voy a el fin del mundo, donde nadie me va a ver. Necesito ordenar mi cabeza. Llevo dos maletas: en la primera llevo los diccionarios, el portátil, los blocs de notas, los bolígrafos, Charlie Parker y música de los ochenta; además del anorak donde llevo envueltas la nikon, la kodack y la zenit. Mañana compraré los carretes para la analógica. Llevo la grabadora también. Hace tiempo que no grabo a los pájaros. Necesito leer poesía en voz alta. Llevo un maletín con las siguientes obras: el principito -para las noches no hay nada mas increíble-, los mecanismos de defensa del yo -escrito por la hija del señor Sigmund Freud-, Poesía de Pablo Neruda, cuentos de Murakami - en italiano- y por último por quién doblan las campanas, de Ernest Heminway. Además de eso, tengo pensado escribir un par de relatos cortos para enseñártelos cuando nos veamos. No hay nada que me inspire más que el aislamiento del exterior.
¿Que te parece? Seguro que te encantaría acompañarme. Pues te digo que solo necesito mi cama calentita y mi ordenador, mis dedos conseguirán quitarse el frío de encima.
Ah! olvidaba decirte que me llevo para ver algún film, de David Lynch, por ejemplo; aunque tendré que verlo durante el día, pues no querría que el insomnio se apoderara de mi mente.
También llevo todo tipo de fruta, verduras, pasta, quesos, embutido y varias cosas más. Whiskey, vino y cerveza. Marihuana, aunque no sé si la necesitaré. La mente está clara sin ella en ese lugar, no es como en la gran ciudad.

En fin, espero que no te mueras de envidia si es que llegas a leerme antes de mi vuelta. Cuando llegue ese día traeré tantas letras para tí que te dará vueltas la cabeza.

Hasta ese día, adiós al mundo exterior.



Lou

mardi, octobre 20

Retratarse a uno mismo

Acaba de cerrarse la puerta.
Estoy a oscuras, encerrada en la habitacion de mi hermano mayor. Huele a cenizas y restos de esperma. Antes de entrar he cogido de la caja de papeles, un papel que tenia escrita la palabra submarino en letra pequeña y lo he colgado en la puerta de su habitación, así que ahora nadie puede entrar, porque eso significa que yo estoy dentro. Si alguien intentara entrar podría hacer algo demasiado desagradable.
Estoy en un submarino, mi submarino. Tengo los ojos abiertos, pero no veo nada. He hecho desaparecer uno de mis cinco sentidos, la vista, así que ahora, el tiempo que pase en el submarino no tendre ojos y mi olfato, tacto, gusto y oído serán un poco mas agudos.
No tengo ojos. Estoy pensando que no tengo ojos y me llevo las manos a tocar los globos oculares, húmedos y tibios, y los siento muertos. Abra los ojos todo lo que los habra no consigo ver nada.
Aspiro hondo de nuevo y huelo a sexo. Un olor dulce y desgarradoramente adictivo. Estoy ya respirando a un ritmo muy acelerado, un ritmo que va augmentando conforme ese olor llega a mi interior. Estoy sentada en el suelo de mi submarino, al lado de la entrada. Mis pies sucios de andar por casa estan apoyados en el suelo, mi espalda -desnuda- en la puerta, mis manos en mis muslos.
Ya me he hecho a la oscuridad. Me estoy acercando sigilosamente a la cama. Allí es de donde llega todo lo que huelo. O de allí o del rincon que da al patio, donde lo veo siempre masturbarse por las tardes, despues de comer. Me estoy acercando, palpando el frío de cada rayola del suelo, la textura suave de las sabanas y la ropa tirada por el suelo. Tanteo buscando aquel rincón, el rincón donde siempre le veo. Mientras tanteo pienso lo que estoy escribiendo, pienso que estoy escribiendo, pienso que he llegado al rincón y que he encontrado unos calzoncillos de mi hermano tirados cerca de allí, en el suelo. Los tengo en la nariz. Los huelo como si estuviera poseída por una sombra interna que no me deja interrumpir la acción; como si sollozara sonoramente y atragantandome con mi propia saliva; con tantas ansias que creo que si no paro acabare por hacer mío ese olor. Todo mi cuerpo tiene ahora ese olor. Mi cuerpo reconoce ese olor como suyo, y he tirado los calzoncillos al suelo como si fueran pescado comido.
Ya no me sirven. Ya no los quiero.
Estoy buscando a tientas la cama, que no encuentro. No logro tocarla. En la oscuridad todo a desaparecido. Me siento aturdida. Estoy pensando solamente que quiero encontrar la cama, quiero tocarla. La toco. Me estoy quitando la ropa y la estoy dejando en el suelo. Estoy subiendo mi pierna desnuda a la cama. Mi sexo queda abierto por un momento, y de repente se cierra cuando he subido la otra pierna. Una gota de mí a caído en la sábana.
La noto en mi muslo. Quiero inclinarme y olerla, pero me siento exhausta.
Como un feto dentro de una placenta cálida me dejo escurrir entre las sabanas.
Mi atención está en el frío que provoca la gota en mi muslo, un frío que me hace estremecer.
Y ahora, me he quedado dormida, porque ya no puedo mantener abiertos los ojos por mas tiempo.

No, hoy no.

Lou

dimanche, octobre 18

vendredi, octobre 16


¿y para qué?
¿y para quién?

mercredi, octobre 14

De buena mañana, en el coche, observo las luces delanteras y traseras de los vehículos que me rodean. Pienso que es curioso ver tantas y tantas luces a horas tan tempranas. Aún el sol duerme y nosotros ya estamos despiertos. Ojalá pudieramos dormir lo que duerme el sol, o sea nada. El sol no duerme y nunca se cansa. Da vueltas, viaja, ve mundo, y no se cansa.
Yo, en cambio, me siento cansado. Padezco migraña si no descanso. Sueño letras. Veo letras por todas partes. Te envidio sol. Si no necesitara dormir tendría tiempo para hacer lo que quiero. El cuerpo traiciona a la mente, que querría permanecer despierta eternamente. Vaya, de nuevo con la immortalidad. Estoy sensible ultimamente. Lo noto en las palabras.

Vuelvo la vista hacia atrás y veo luces blancas que me siguen. Si miro a delante veo luces rojas que aumentan y disminuyen su intensidad. Si miro en sentido contrario veo luces blancas que vienen y rápido desparecen de mi campo de visión. Voy avanzando por una carretera. Voy sobre cuatro ruedas. No estoy solo. Hay muchas mas personas sobre cuatro ruedas.
Yo canto. Canto Katy Melua estos días. Una canción en inglés que habla de los hechos y las adivinanzas y las compara al amor. Dice así:

'There are nine million bicycles in Beijing That's a fact, It's a thing we can't deny Like the fact that I will love you till I die. We are twelve billion light years from the edge, That's a guess, No-one can ever say it's true But I know that I will always be with you.'

Me imagino la distancia que nos separa de otros planetas, aunque es algo que nunca podré ver por mi mismo.

Dentro de seis horas y media volveré a cantar al volante y a estar rodeado de luces.
Ahora me voy a la cama. Leyendo Le petit prince, de Antoine de Saint- Exupéry.
Dibujos de boas que comen elefantes enteros y asteroides destruídos por baobabs.

mardi, octobre 13

(Todo esto debería leerse como un susurro. Prueba a hacerlo en voz baja, como si hablaras con un escarabajo que duerme a tu lado)

Pies en el suelo. Siento como el frío es frío. Siento como la noche se acaba y da paso al día. En la boca del metro, frío. Empiezo a ver personal vagabundear de aquí para allá. Veo caras somnolientas, cuerpos sonámbulos que caminan sin mirar. Piernas que no son conscientes de sus pasos. Barrigas que hacen la digestión matutina. Caras tristes y alegres. Veo gente, mucha gente.¿Y quiénes son?¿Quienes son esos que me hacen sentir tan pequeño? ¿Quienes son esos que tienen un cuerpo como yo?Preferiría salir a la calle y encontrar animales por todas partes. Así podría recorrer el mundo entero sin temer por nada. Podría adquirir todo lo que quisiera, pues todo sería mío. Podría habitar en todas las casas ahora habitadas. Podría comer cada día en un plato distinto, en un lugar distinto. Podría conducir un avión. Para volar aquí y allá. No hecharía de menos las palabras, sí las miradas. Estaría todo el día ocupado en explorar el grande planeta, y si pudiera otros más.
Pero,ahora que lo voy pensando mejor prefiero quedarme en casa... aquí tengo poco, pero puedo soñar todo lo que quiera. Y un sueño, si se hiciera realidad dejaría de ser un sueño. Y lo único que nos mantiene vivos son los sueños y futuros llenos de sueños. Somos soñadores. Los que no son soñadores mueren. Y los soñadores son los únicos que mueren de viejos. Porque aguantan hasta el final, hasta que ya ven que no queda nada.Siento frío. Siento el frío en mis pies. Hoy sueño que mañana podría no estar sintiendo este frío, en un apartamento de Manhattan, por ejemplo. Y sigo vivo.Sigo vivo. Sigo vivo.

Dan perdona mi locura, soy un soñador y temo no morir de joven.Perdonen este horrible texto, tengo sueño. Pero si no lo publico nunca llegará a Dan. Buenas noches soñador. Sueña muchos sueños de noche. A mi me apetece uno erótico. Hace tiempo que no lo paso bien solo en la cama.

Lou

(que horror, acabo de releer esto y es imperdonable! Que manera de divagar Doriaaaaaaaaaaaaaaaan)

lundi, octobre 12


nuvole rapide... ... ...

dimanche, octobre 11



¿Por qué hacia allí y no hacia aquí?

lundi, octobre 5


Nunca des lugar a que te echen a patadas de un lugar, vete tu antes.
Miserables mendrugos y detestables señoritas, no los quiero volver a ver en mi vida. Que desonor compartir una comida tan buena con tal pandilla de inútiles. Mientras comía las gambas tenía la sensación de estar arrancándole la cabeza a la gordinflona de dedos rechonchos que se sentaba delante mía. Uñas rojas mal pintadas. Una boca grande llena de aceite y vinagre. ¡Qué manera de comer! Si pudiera hubiera escapado de allí, corriendo, a cualquier otro lugar. Hubiera disfrutado más de las habas.
Otro día juro que salgo corriendo. Odio las comidas en compañía de desconocidos. Odio esos dichosos restaurantes baratos. Me deprimen.
Lou

samedi, octobre 3

Raina imaginate escuchandola en una celda acolchada, tumbada en el suelo, desnuda.
Imaginate escuchandola en un dormitorio, sucio, con restos de una noche de perra salvaje.
Imaginate escuchandola en un cuarto de baño, lleno de rimel y con olor húmedo a jabón.
Imaginate escuchandola en un salón, de color rojo y con aroma a cereza.
Imaginate escuchandola en una habitación de piedra, fría. Un sonido hueco, opaco.
Imaginate escuchandola en un auditorio, con asientos de cartón.
Imaginate escuchandola en un salón de conciertos, con olor a sudor y cuerpos desnudos.
Imaginate escuchandola en una caverna. Fuerte olor a cerveza y barbas larguisimas.
Imaginate escuchandola en un estadio. Llega a traves de los berridos humanos.
Imaginate escuchandola en un hangar, rodeada de piezas de aviación.
Imaginate escuchandola en un pasillo enmoquetado de un sucio motel.
Imaginate escuchandola en un corredor de piedra, muerto, desnudo.
Imaginate escuchandola en un callejón, vacio a lo lejos. Nada se ve.
Imaginate escuchandola en un bosque, en su espesura, su color.
Imaginate escuchandola en una gran ciudad, sucia, como por ejemplo Milano
Imaginate escuchandola en una montaña. Alta y poderosa, cima nevada.
Imaginate escuchandola en una cantera.
Imaginate escuchandola en una llanura. Lisa, sedosa. Tu allí, con el viento.
Imaginate escuchandola en un aparcamiento nocturno, follando y sudando.
Imaginate escuchandola en una cañería, hueca, horizontal y vertical.
Imaginate escuchandola bajo el agua, en un mar, oceano, rio, piscina, fosa, pozo, water, pica, botella de agua...

Conmigo, siempre conmigo. No sin mi.

lou
¿Sabéis algo sobre londres?
¿Una habitación donde dormir?, por ejemplo.

lundi, septembre 28

Metido en una clase de física de una universidad. El despertador ha sonado exactamente a las 6.01 de la madrugada. He abierto los ojos y encontrado la oscuridad. He buscado por la mesita de noche, pero no lo he encontrado. Aún sonaba. He recordado que anoche dejé el despertador encima del escritorio, para así tener que levantarme obligado. He sonreído, lo he hecho. Ya empieza a hacer frío a esas horas, así que me he metido rápidamente en la ducha. Al salir me he vuelto a meter en la cama y he estado cinco minutos secándome allí dentro. Pasado el tiempo me he vestido. He exprimido dos naranjas y comido dos dátiles. Mientras leía cahiers du cinema. Hablaban del film Tesio.
Cuando he salido de casa he ido a la parada del autobús. He ido de pie todo el tiempo, no había sitio. Que incompetencia. Todo el viaje de morros. Dichoso conductor.
Al llegar me he metido en una clase y aquí estoy. He traído por quién doblan las campanas de E.Hemingway y lo estoy leyendo, porque ya llevo unas dos horas oyendo cosas sobre gravedad, masas, senos, cosenos, tangentes, cargas de dos tipos, hipotenusas, angulos beta, gamma, delta....y mi cabeza se ha reducido a polvo.
Sin duda prefiero la literatura.
Ya he tenido suficiente esta mañana, decidido: no volveré a colarme en una clase de física.

LOU k.

dimanche, septembre 27

Vuelvo a tener ansiedad. Lo sé porque mientras duermo sueño que no paro de contar cosas. Cuento días, números, objetos, palabras. Se van sumando y se amontonan en mi cabeza. Luego pienso ¿ para que quiero yo todo esto? y es así como me doy cuenta de que eso no existe y son solo imágenes ansiosas. Las páginas y páginas rotas. Me supone un reto enorme el tener que escribir con mis palabras algo que no sé de que va, pero me niego a leerlo todo, es basura. En fin, que le voy a hacer. Todo sea por el dinero. Necesito ese dichoso dinero para poder alquilar un apartamento lejos de aquí! Aquí hay demasiados conocidos que no hacen mas que molestar y distraer con sus fiestas! La ciudad está sumida en una espécie de Caos nocturno del que nadie puede salvarse. Me pregunto si los fines de semana hay alguien mas que se quede traduciendo hasta largas horas de la noche en vez de emborracharse, hasta quedar agotado, medio muerto, encima de una silla. Me dormí con la luz encendida! Cuando me desperté el cd de Mike Oldfield que tenía puesto aún no había acabado. Mañana temprano volveré a la filmoteca. Necesito inspiración, señor!!
¿Dónde se ha metido?

LOU

samedi, septembre 26

Dan, esta semana estoy muy ocupado. He estado traduciendo millones de páginas. Creo que debería ir a París a refrescar mi francés, lo estoy pensando. Me invitaron a pasar una semana pero no es suficiente. Necesito volver a sentir las noches de París para poder seguir adelante! Voy a trabajar. Te escribo con muchas ansias, porque tengo ganas de contarte una historia. En menos de nueve horas te la cuento.
¿Estás feliz? ¿bien?
Deseo que si.
Buen domingo dormilón

Lou

mardi, septembre 22

invierno helado; Milano

He estado pensando y, hay algo que echo muchísimo de menos. Cuando salía del apartamento, con mis botas de agua, mi gabardina y mi sombrero, y atravesaba las calles cubiertas de hielo hasta llegar a la parada del tranvía. Entrar al viejo tranvía, en el que hacía un frío que pelaba. Uno de esos viejos, que te trasladan años atrás en el tiempo y te hacen sentir como si fueras un elemento más de una bonita escena; esos que chirriaban al pasar le colonne di san lorenzo,y que paraban delante de la libreria del corso. Bajaba, muerto de frío, tapándome bien el cuello y caminaba deprisa. Atravesando la pescadería, la creperia, la tabaquería, el puente, la pizzería donde cenábamos Noa y yo solo cuando ella venía a verme -fueron cuatro veces exactas, y todas ellas pedí lo mismo: pizza al salmone -, y por fin llegaba al lugar, el gran lugar. A veces solo, otras acompañado, bebía mi cocktail - hurricane -, y comía brie, prosciutto cotto, gnochi, patate al forno, penne alla bolognesa e arancia rossa. Cuando salía me sentía verdaderamente pesado! Recuerdo aquella sensación! Y de nuevo el frío, el hielo, las conversas, las risas, el alzaia naviglio pavesse, el puente, y la casa rosa, encima del restaurante. En el primer piso. Nuestro apartamento. Con el parquet rojo, los azulejos azules y el espejo pintado con pinta labios en el baño, mis fotos de Andy Warhol colgadas en la pared de la habitación, la bañera de madera donde pasé horas y horas y horas leyendo sin parar, cantando sin parar, recitando sin parar. Esa cama grande donde dormí con Elisabetta todas las noches, el suelo de madera de la habitación, el armario, la olivetti azul al lado de la nevera eléctrica, las sillas forradas.Echo de menos Milano, sobre todo esos dias de invierno en los que hacía frío y no salía de la bañera de mi habitación, que ahora ya no es mía. Que nostalgia.

Louise.

dimanche, septembre 20

¿Será la luna?¿la lluvia? ¿El viento que sopla fuerte y frío? Me siento débil. Me pesan los párpados, me tiemblan las piernas. Mañana tengo la intención de levantarme temprano y irme a la filmoteca a leer la biografía Buster Keaton que tengo a medias. Luego me tomaré un café en la plaza de los filósofos y comprare un vestido azul. Tengo sueño y no me siento capaz de pensar y escribir. Asi que...buenas noches tormenta.

Lou

vendredi, septembre 18

El mundo es gigante. Solemos verlo de dos en dos. ¿Te acuerdas de todos los viajes que hicimos juntos? en la mayoría de fotografías estamos los dos solos, en otras los dos juntos, en otras ninguno, solo esos paisajes que siempre están allí. Es triste pensar que cada lugar, que cada cosa, tiene un significado especial para cada ser. Cuantas veces hemos soñado con ser los únicos que poseemos conciencia de todo! En verdad no somos nada. Dan, me siento minúsculo si no estas a mi lado! Me estoy comiendo un melocotón y me estoy poniendo perdido! Ahora he decidido que no cenaré por las noches. Como fruta por las tardes y ya no como luego, o como mucho cereales con leche. Esta noche pienso ir al cine, a ver la ultima de Tarantino. Así, para abstraerme un poco, y pensar que en otras épocas la sociedad estaba mucho peor de lo que está ahora. En el estudio hace frío, tengo los pies helados. Barcelona hoy estaba empapada. Ha llovido a las diez de la mañana y la lluvia me ha impedido hacer un café antes de entrar en la filmoteca. Luz verde; verde, verde.
No he conseguido escribir nada hoy, creo que saldré a tomar un café. Alguien encontraré que me inspire, o eso espero. Ya he colgado el reloj de 49 Bond Street que me enviastes. Tenía la ilusión de que fuera una pista de donde estabas, pero he descubierto que no lo es. La calle está poco habitada y tu no vives allí, ya me he asegurado de ello. Así que supongo que solo querías decirme que el tiempo pasa. Es gracioso, lo he colgado justo detrás de la pantalla. Lo tengo delante. Te he imaginado comprándolo, en cualquier lugar; envolviéndolo, en cualquier casa; enviándolo, en cualquier oficina de correos. Me pregunto cuántos kilómetros habrá volado, flotado o rodado. Me gustaría preguntarselo. Lo he hecho pero no me contesta. En fin, creo que salgo, aquí no hago nada hoy. Qué dura la traducción! Olvido todo lo que he aprendido por momentos! Lo bueno es que tengo todo el tiempo del mundo! Ya te diré si me gustó la película... almenos las palomitas sé que me gustarán seguro.

Louise

jeudi, septembre 17

Ayer, al anochecer estuve con Gatien tomando unas copas. Nos emborrachamos. No tiene control. Bebe, bebe y bebe! nunca he visto a nadie sorber tantos y tantos litros como lo hizo ella! Como si fuera su té rojo, Dan, te lo juro! Está de muy mal humor, la veo sola y sin ganas de nada! Su belleza ha oscurecido y ahora en sus ojos solo veo tristeza! No soporto verla así. Me siento impotente. No puedo hacer más por ella que pagarle todo, o mayor parte, de lo que bebe. La situación es deprimente. Si anoche hubiera sido un expectador ajeno hubiera visto lo siguiente:
Un tipo con sombrero y gafas gigantes, vestido de traje, que quiere destacar y no lo consigue, cruzado de piernas y con el codo apoyado a la mesa, bebiendo sorbitos de su vino y mirando unos labios rojos que no paran de hablar y sorber, hablar y sorber, hablar y sorber. Unos ojos con el rímel corrido. Un pelo largo alborotado. Unas piernas largas y delgadas magulladas. Unos zapatos de tacón medio caídos. Un tobillo desnudo.
Qué glamour mas triste.
Gatien no paró de hablar. Ni siquiera me escuchaba. Todo lo que decía era absurdamente abstracto. No puedo creer que eso saliera de ella, de veras. Hablaba de las pocas razones que tenía para vivir, de lo que le faltaba y de lo que quería, de la crueldad que mostraban todos los que le rodeaban -exceptuándome a mí, cosa que dijo porque yo estaba presente-; en fin, deprimente.
No la reconozco, Dan.
Necesitaba contarte esto. Nos tienes sorprendidos, ha pasado tanto tiempo y no sabemos nada. En fin, espero estes bien. Gatien no te nombro en toda la noche, pero te puedo asegurar que en todas sus palabras estabas presente.
No se si debería decirtelo, pero, después del lab's la acompañé a su casa y me pidió que le hiciera el amor.
Lo hice.
Aunque no creo que eso sea lo que mas importe ahora.



Louise

mardi, septembre 15

¿Dónde estás?

Cuando intentaba crear una escena a Dan la mente se le quedaba en blanco. Lo recuerdo mirando al vacío. En los cafés, mientras pensaba se mordía el labio inferior con los dientes y muchas veces se hacía heridas. Le gustaba que me sentara en una mesa alejada de la suya y que lo observara. Dan adoraba que le adorasen. Si hubiese tenido la oportunidad de mirarse en un charco de agua horas y horas, como hizo Narciso, también se hubiera enamorado de él mismo, estoy seguro. Mientras le observo. Mirándolo siento como todo parece mas pequeño. Su grandeza se expande metros a su alrededor. El modo que tiene de observar a través de sus ojos negros me deja sin respiración.
Imagino como debe ser su cuerpo desnudo, sin la elegancia del vestir. Me pregunto cómo sería Dan sin sus pantalones de pinzas y sus camisas viejas; bueno, me lo preguntaba.
Dan, donde quiera que estes, quiero que me digas algo. A través de este dichoso ordenador o por teléfono. Me moriría al escuchar tu voz! Casi ni la recuerdo! Te pienso, y sé que me piensas. Llámame, escríbeme o por lo menos leeme! Envia señales de humo, mensajes en botellas, hazme saber de tí telepáticamente. Boston es demasiado grande para tí...Demasiado pequeña para los dos!

Louise

lundi, septembre 14

Entré al bar con el propósito de emborracharme. Después de todo el día intentando hacer algo no he conseguido encontrar nada que hacer. He estado dando vueltas, mirando arriba y abajo, entrando y saliendo de lugares, observando las caras de los felices que me rodeaban. A momentos he visto personas perdidas, como yo. Antes tenían algun objetivo en la vida, ahora carecen de él.
Aún no recuerdo como acabo todo. Como empecé a sentir que ya no había nada que hacer, nada por lo que levantarse cada día. Perdí toda esperanza en cuestión de días.
Sin rumbo, ahora solo queda vivir sin rumbo.

tengo sueño.

Louise

dimanche, septembre 13

Entre la hierba

Anoche me perdí entre la hierba. Algo se fué, se desvaneció.
Dormía. A las cinco de la madrugada me desvelé. Estaba sola. un lugar desconocido. El cuerpo que esperaba encontrar a mi lado no lo estaba. Noto como la respiración se me acelera y se me abren los ojos. Me despierto. Recorro el piso buscándolo. Ni rastro de él. Sigo estando sola. Me tropiezo con una maceta, me hago daño. Enciendo la luz de la sala de estar: botellas, comida, colillas y café encima de la mesa. Algo verdaderamente deprimente. Le deseo la muerte. Busco el teléfono. Lo llamo. No hay respuesta. Era de esperar. Busco su teléfono. No está. Llaves? tampoco. Se ha ido. Pienso en irme. Pienso en quedarme. Debo descansar para poder rendir al día siguiente. Me meto en la cama. Pienso. Maldigo. Me exaspero. Ansia. Ansia. Ansia. No parezco evolucionar de ningún modo. Consigo dormir, o eso creo. Oigo la puerta. Me desvelo. Pasos. Interruptores. Luces. Pasos. Ansia. Carraspeo. Vuelta. Sudor. Rabia. Luz. Cadena. Botella. Suspiro. Alguien se mete debajo de las sabanas. Me roza la piel. Me aparto. Chillo. Déjame en paz. Déjame en paz. Déjame en paz. Duermo en paz.

Louise

jeudi, septembre 10

de la idea al film, Julio Diamante

cine y novela
'A diferencia de la novela el film se desarrolla en un eterno presente. El pasado y el futuro tienen la misma presencia que lo actual.
La preocupación por el objeto es característica de la novela de nuestro tiempo. Se describe objetivamente, casi geometricamente el objeto, evitando el nombrarlo.'

Cine y teatro
La poética de Aristóteles estudia los orígenes del teatro, especialmente la tragedia.
Considera que la tragedia es la mímesis de una praxis.
La mímesis, imitación, reproducción o expresión de una praxis, entendida como acción iniciada con un propósito determinado que continúa desarrollándose en busca de dicho fin.
El mythos es la estructura de hechos y personajes, la trama, el argumento que expresa la acción que ha de constituir el fundamento esencial de la tragedia.
Una peripecia es un suceso repentino, imprevisto, que viene a cambiar de forma fatal la dirección en que se desarrolla la acción.
Una anagnórisis es un reconocimiento de algo que se había olvidado o descuidado; un reconocer la identidad de otro o de uno mismo.
El fin de la tragedia es alcanzar la Katharsis, la purificación, por medio de la compasión ante un sufrimiento inmerecido y el temor, ante la desgracia de los que son semejantes a uno, o están expuestos a peligros semejantes.

A excepción de los componentes fatalista y catártico, tan especificamente propios de la tragedia, que podrían también ser válidos para la tragedia cinematográfica, vemos que los elementos restantes se corresponden con los empleados frecuentemente en el cine.

La distancia entre teatro y cine es representar y ser
Dreyer

Una diferencia esencial entre el teatro y el cine radica en el montaje, que fue calificado en su día como el específico fílmico.
En el teatro hay tantos puntos de vista como espectadores; en el cine solo hay uno, el de la cámara que haya filmado el plano.


Louise K.


Desde la filmoteca

mercredi, septembre 9

Gladiator; Ridley Scott.

Cuando los ojos se me cierran, después de todo el dia despierta, me tumbo en la alfombra de mi habitación después de haber apagado las luces y dejado encendida una vela. Miro al techo y veo como se mueve la luz de la llama. Miro al techo hasta que cierro los párpados, los relajo...y empiezo el método propuesto por Cosntantin Stanivslasky para la preparación de los actores.
Actores. Personas magníficas capaces de evocar cualquier emoción vivida a través de un objecto físico o de su propia imaginación; personas con autocontrol y con una enorme capacidad para dejar la mente en blanco y dejarse llevar. Dejar de pensar en todo lo que normalmente nos ocupa la cabeza, y ser libres.
Seres que han alcanzado la libertad absoluta y que se han sabido reconocer como un cuerpo y una mente. Me encantaría poder decir que tengo esa capacidad de evadir las cosas que me pasan continuamente por la cabeza. Desgraciadamente no es así. No tengo esa capacidad. Eso se adquiere mediante mucho trabajo y concentración. Horas y horas de abstracción y realización personal. Elevar algo que va mas allá de lo común en todos los seres humanos que pensamos y sentimos. Conseguir que las emociones dejen de controlarnos, para controlarlas.

Que envidia de gladiador. Que envidia. Ojala pudiera yo, mi yo.

Louise

Mísera preocupación


Miro la pantalla y veo miseria. Veo personas que sufren, lloran, berrean, vomitan, se retuercen, se pinchan, se cortan, se matan. Veo que todo lo que provoca tristeza está presente en nosotros a diario, al menos en alguno de nosotros aunque no en todos.

Veo que cuando paseo y, por la calle o en cualquier otro lugar, veo el rostro y el cuerpo de algún ser humano lo desprecio. Más que desprecio podría decir que no lo valoro. Al no pertenecer a mi mundo lo desecho y no me cuestiono el porqué no pertenece a mi mundo. Ayer casi atropello a una persona. Esa persona me miró con una cara llena de malicia y reproches.

¡Y yo que solo estaba despistada mirando esos nuevos supermercados que venden sus productos a través de cajeros automáticos como hasta hace poco se alquilaban los filmes!

Pensé que no era para tanto. Pensé que no merecía esa mirada. Que el azar podría hacer que en un futuro nos encontráramos de nuevo y fueramos seres unidos.

La unión es algo muy importante. Si no te une nada a una persona a esa persona la desvaluamos. Y podría superar muchas barreras fuera capaz de dejar de lado esos prejuicios que me creo sobre los demás.


pd: pido perdón a un niño por chillarle en el parque. Si alguna vez me lees, quin quiera que seas, que sepas que lo siento, pero me diste miedo. Tengo un pánico increíble a los balones de futbol. Los encuentro asesinos.



Louise

vendredi, juin 26

Gouffre

Gouffre
Al me dijo que debía cepillarse los dientes antes de salir. Hacía ya media hora que lo esperaba y me estaba poniendo nervioso. Salí de la habitación dejándolo a él solo hablando de su vida sentimental con Nora, que a mi poco me importaba. Me quedé fuera, sentado en el pasillo. La casa de Al era de pasillos grandes, con el suelo forrado de moqueta roja, cuadros de muchísimos pintores colgados por todas las paredes - pintores muy célebres, Al lo repite a cada instante -. La baranda que da a las escaleras es de hierro. La pintamos de blanco hace 2 años y medio. Esta casa la reformamos juntos. Siempre miro la barandilla de hierro que pintamos juntos mientras Al acaba de prepararse, porque nadie sabe lo que Al puede llegar a tardar si se lo propone. Miro la barandilla y me vienen en mente recuerdos. Recuerdos de Al y yo llenos de pintura, revolcándonos por la moqueta y golpeándonos el uno al otro; recuerdos de las carreras por la casa, para ver quien encontraba primero la botella de whisky que habíamos escondido la noche anterior. Nunca me ha gustado pensar en el pasado. Prefiero pensar en el presente porque me hace sentir mas seguro. Pienso en el pasado solo en los momentos en que algo, algo externo, me transporta. En esas ocasiones me dejo llevar. Me gusta saber que lo que viví aún está en mi memoria, aunque no esté en la de nadie mas. Pero me entristece no poder tocar esos momentos. El pasado no existe, porque no puedo tocarlo. Porque ayer mismo yo mismo estaba sentado aquí esperando que Al se hiciera el nudo a la corbata y se metiera la camisa en los pantalones, mirando la barandilla y pensando. Y pienso, pienso que no vale la pena recordar porque te invade la nostalgia. Y ya no recuerdas tampoco lo que viviste y como lo viviste. Lo revives con mas pasión, lo anhelas más y más. Porque ya nunca podrás recuperar ese momento.
- Dan, estoy listo. Nos vamos?
- Si, solo te esperaba
- Otra vez mirándonos bajar las escaleras corriendo?
- Me temo que si
- Anda vámonos que falta poco para que se ponga

Me coge de las manos y me levanta del suelo. De pie, nos miramos, y Al me sonríe, con esa sonrisa suya, que no enseña los dientes, solo alarga los labios. Y me siento bien, porque estoy con él. Llegamos al Gouffre, como cada tarde. Nos tumbamos y leemos. Y esperamos a que se vaya el sol.
Me encanta ver a Al tumbado en el suelo, con la camisa desabrochada y los pantalones azul marino con el cinturón negro que le tapan el ombligo, y sostiene el libro sobre su cabeza. Y susurra todo lo que lee. Es lo que mas me gusta de Al.

i.c

samedi, mai 16

Desorientazión.


Hace unos días que leo a Freud, James... que me hablan del sistema nervioso, de la histéria, de los estados sugestivos, de los hábitos. Como soy un poco hipocondríaca y un tanto propensa a creer que soy débil - físicamente, claro - creo que lo que leo me afecta más de lo que debería afectarme. A medida que avanzo en la matéria me doy mas cuenta de lo frágil que somos, de lo frágil que soy. A veces, cuando estoy de mal humor o un poco triste intento evitarlo pensando que es algo que puedo controlar - y en realidad es así -, pero no sé como hacerlo. Tengo cambios de humor muy bruscos. Pequeñas cosas me ponen nerviosa y otras pequeñas cosas me hacen sonreír. No sé como lograr controlar lo que siento. Como futura psicóloga me gustaría llegar a controlar un poco más mis emociones y sentimientos. Así, alomejor, dejaría de tener momentos en los que estoy apática, como por ejemplo ahora. En vez de estar escribiendo sobre mi desorientazión momentánea podría estar haciéndolo de la fin del mundo y del tiempo que me va a ocupar su traducción. Sí, voy a intentar traducir un libro de Haruki Murakami que aún no ha estado traducido al español. El problema - o gran problema -, es que mi traducción será a partir de otra traducción, la italiana. Pero mejor eso que no poder saber de que va tan magnífica história. Cuando tenga algo mas claro ya lo comunicaré.


Gitz.C

vendredi, mai 15

Finalidad


No se si empiezo este blog con alguna finalidad especial.

Cinematheque, por ejemplo, si que tiene una finalidad concreta: publicar las películas que voy viendo diáriamente y que considero incríbles obras de arte. Como futura regista - que significa directora cinematográfica en italiano -, puedo asegurar que durante este último año que he pasado en italia he aprendido muchísimo sobre el arte cinematográfico y fotográfico. He dedicado todo mi tiempo a ello y así he ido formando mis pequeños ideales. Viendo una media de tres películas diárias, deborando novelas, ensayos y libros de texto de todo tipo, paseando, en cafés, bares, montañas, pistas de baile, camas y todo tipo lugares cada uno diferente de un modo u otro, he ido forjando mi personalidad. Y es a mí, a mi persona, a mi yo, al que quiero conocer. Al que deseo conocer. Al que deseo amar y comprender.


La fine del mondo , la fine del mio mondo. Niente più.


Gitz.C