lundi, octobre 3


SINCRONÍA
Por Chabriol

INT/NOCHE. Dormitorio de Edie

Desorden. Olor a humo de cigarrillos. Edie está tumbada en la cama, en ropa interior. Dan está sentado en una butaca, vestido de traje, pues acaba de llegar de trabajar.

Prefiero mirarte de espaldas sin que te des cuenta
¿te gusta?
Si. Me gusta también mirar a través de tu puerta y ver los pies en la cama mientras duermes la siesta a media tarde
¿por qué?
Porque te tumbas boca abajo y los pies se te salen del colchón.
Estas loca
Estoy un poco caliente
No quiero gustarte, Edie
Lo se, pero yo no puedo evitarlo. Tampoco te he pedido que te guste
No quiero que vuelvas a espiarme
Nada de eso, eres tu el que deja las puertas abiertas. El otro día, por ejemplo, te sentaste en el baño y hojeaste una revista durante más de un cuarto de hora. Me senté en el suelo y miré tu reflejo en el espejo. Solo se te veía medio rostro, pero para mí eso es mas que suficiente. Si no fueras un exhibicionista cerrarías las puertas.
No soy ningún exhibicionista
Claro que lo eres. Siempre dejas todo a la vista. Dejas lo que los psicólogos llamamos huellas de erosión. Siempre sé si has llegado a casa tarde, si has bebido vino, cuánto has fumado y si has comido algo, por ejemplo.
Yo seré un exhibicionista, pero tú eres obsesiva.
¿Obsesiva yo? Solo me intereso por lo que a tu persona respecta. No es a ti a quien quiero para mí, y lo sabes. Solo que ahora mismo me gusta mirarte y seguir tus movimientos, saber dónde estás y que haces. Dentro de unos meses no querré saber nada de ti nunca mas y entonces serás tu el que me eche de menos.
            ¿Eso crees?
            Eso será, y sino ya lo veremos.
            Déjate de tonterías Edie, sabes que nunca conseguirás que hagamos el amor.
            Estoy mas cerca de eso de lo que te imaginas.
            Te dejaré pensar lo que quieras.
            Si al menos me gustaras tu…pero me gusta tu otro tu, el que aparece en mis sueños. Como he podido llegar a meterme tales cosas en la cabeza. Soñar una vez y otra que hacemos el amor y acabar creyendo que te deseo de la forma en que lo hago ahora mismo, sin que en ningún momento tú en persona hayas despertado en mi ningún tipo interés…
            No te entiendo
            Que mas da, ahora te deseo a ti. Ya no importa más.