Quería decirte que me encuentro sola. El barco no para de moverse y me he pasado el día vomitando al mar. ¿No me dijistes que los barcos tan grandes no se balanceában? Esta mañana dormía. Debían de ser las once cuando alguien a picado a la puerta con los nudillos de las manos. Pensaba que era un sueño, pero luego me he despertado y he caído en la cuenta de que alguien me buscaba. Cuando me he puesto en pie he sentido una náusea tal que he tenido que dejar a mi buscador y dirigirme al baño.
Al abrir la puerta, una mujer vestida de blanco me sonreía.
Buenos días
Buenos días
Espero que hayas dormido bien
Si...perfectamente. ¿quién es usted?
Vengo a traerle su desayuno
Pero...yo no he pedido que me lo traigan
Alguien me ha mandado a traerselo, ¿puedo dejarlo encima de la mesa?
Si...,claro.
Cuando se marchó me sente frente a la bandeja repleta de galletas, leche, pan, vino y diversos helados.
Pues vaya desayuno tan extraño...., pensé.
Engullí todo lo que me habían traído y me sentí satisfecha, tanto que tuve que volver al baño.
Decidí pasar la mañana en la cubierta leyendo un libro de poemas que me he traído conmigo. Así podré algun día dedicarme a susurrar versos a alguien, pensaba mientras subía.
Hay poca gente por la mañana. Deben estar todos dormidos, refugiados en sus camarotes. Aún hacefrío.
Me tumbé en una hamaca de madera y empecé a leer. Luego empecé a pensar...y volví a marearme.
Pasaron las horas y fui a comer. En el comedor, un hombre se me acercó y me pidio permiso para sentarse conmigo. Acepté, ya te he dicho que me siento sola.
Era un hombre atractivo, de hecho aún lo es. Su cuerpo es esbelto y su estilo me gusta bastante. Un hombre inglés. Pero no te pongas celoso, es solo un americano....
Lo que te quería decir es que...ahora está aquí, conmigo. Pasamos la tarde charlando y luego me invitó a cenar...así que bebimos un poco de vino...y la soledad...sabes que no soporto la soledad... y encima aquí, entre las aguas, que me dan náuseas.
Perdóname...necesitaba contártelo.
Sigo siendo tu Grace, espérame.
Te quiero
Grace